Los Tres Tipos de Rocas
Las rocas ígneas se forman a partir del fuego. Cuando el magma del interior terrestre sale a la superficie en forma de lava y se enfría, se solidifica creando este tipo de rocas. Son testigos directos de la actividad volcánica de nuestro planeta.
Las rocas metamórficas tienen una historia de transformación. Estas rocas han cambiado su estructura original debido a la intensa presión y altas temperaturas en el interior de la Tierra. Estos factores pueden originar nuevos minerales, modificando completamente la roca original.
Las rocas sedimentarias se forman por acumulación. Partículas de otras rocas o restos de organismos marinos se transportan por viento, agua o hielo, y se depositan en capas que con el tiempo se compactan. Estas rocas son como páginas de un libro que cuenta la historia geológica de un lugar.
💡 ¡Dato interesante! Muchos fósiles se encuentran en rocas sedimentarias, ya que el proceso lento de sedimentación permite la conservación de restos orgánicos. Cuando encuentres un fósil, ¡casi siempre estará en una roca sedimentaria!