Surgimiento de la Sociología: Contexto histórico
Tres procesos históricos fueron fundamentales para el nacimiento de la sociología:
La nueva economía industrial dio origen a la producción a gran escala, creando un enorme ejército de trabajadores industriales que transformó la estructura familiar y las tradiciones. El crecimiento de las ciudades ocurrió cuando las fábricas se multiplicaron, atrayendo a miles de campesinos que abandonaban el campo en busca de trabajo. Finalmente, los cambios políticos dejaron atrás la idea de lealtad religiosa a los gobernantes, entendiéndose ahora a la sociedad como producto de acciones humanas.
Aunque existían reflexiones sobre la sociedad desde la antigüedad, fue Augusto Comte quien acuñó el término "Sociología" en 1883. Sin embargo, la consolidación científica de la disciplina ocurrió a finales del siglo XIX gracias a Emile Durkheim, quien planteó estudiar la sociedad aplicando el método científico.
Comte propuso que la historia de la humanidad podía dividirse en tres fases según cómo los hombres explicaban el mundo: la fase teológica (Edad Media), donde predominaban explicaciones religiosas; el estado metafísico (Renacimiento), con explicaciones basadas en principios abstractos; y finalmente el estado positivo, donde se busca explicar los fenómenos en sus propios términos usando el método científico.
La sociología surgió ligada a una situación de crisis y buscaba comprender y estabilizar el orden social alterado por la Revolución Industrial y la aparición del proletariado como nuevo actor social.