Fenicios y Hebreos: Nuevas Potencias del Mediterráneo
Tras la caída de Babilonia, el centro de poder se desplazó hacia el Mediterráneo. Dos pueblos destacaron por sus contribuciones culturales y religiosas:
Los fenicios eran un pueblo semita que habitaba la costa oriental del Mediterráneo (actual Líbano y parte de Siria). No formaron un estado unificado sino ciudades-estado independientes como Tiro, Sidón y Biblos. Su legado más importante fue el alfabeto fenicio, que se convirtió en la base de los alfabetos griego y latino que usamos hoy.
¡Estos increíbles navegantes establecieron colonias por todo el Mediterráneo, llegando hasta España! Fundaron ciudades como Cartago (en el norte de África) y desarrollaron un extenso comercio marítimo. Eran politeístas, y cada ciudad adoraba a su propio dios solar (baal) y diosa lunar (baalit).
Los hebreos eran un pueblo nómada que se estableció en Palestina desde el siglo XII a.C. Según la Biblia, estaban organizados en tribus bajo patriarcas como Abraham, Isaac y Jacob. Tras un período en Egipto, regresaron a Palestina bajo el liderazgo de Moisés.
Formaron el reino de Israel bajo reyes como Saúl, David y Salomón, pero luego se dividieron en dos reinos: Israel (Samaria) y Judá (Jerusalén). Su aporte más significativo fue el monoteísmo, la creencia en un solo dios llamado Yahvé.
💫 El alfabeto que usamos todos los días tiene su origen en los signos que inventaron los comerciantes fenicios. ¡Simplificaron la escritura para que fuera más fácil de aprender y usar en sus transacciones comerciales!