Organización de la Producción Capitalista
El mercado es el centro de la organización productiva capitalista, donde se comercializan los productos generados por los trabajadores. Las relaciones de producción establecen vínculos entre las personas durante el proceso productivo, definiendo roles y jerarquías en el sistema económico.
La lógica de acumulación del capitalismo tiende a generar una concentración de capital, donde cada vez menos empresas controlan porciones mayores del mercado, pudiendo llevar al monopolio. El trabajador, mediante su labor, crea valor que se incorpora a la mercancía, mientras el capitalista aporta principalmente el dinero inicial (capital).
Antes del capitalismo, la producción era predominantemente artesanal y se realizaba en los hogares. El sistema de trabajo domiciliario (como el hilado y tejido realizado por familias rurales) fue una forma de producción previa a la fábrica, mientras que en las ciudades dominaba el sistema de artesanos independientes. La manufactura representó un paso intermedio, reuniendo trabajadores en una planta bajo la administración de un empresario.
💡 La transformación del trabajo artesanal a la producción fabril no fue solo un cambio técnico, sino una revolución en las relaciones sociales que alteró profundamente la vida cotidiana de millones de personas.