Funcionamiento y Consideraciones Ambientales
El funcionamiento de una central hidroeléctrica es bastante sencillo. Primero, se construye un embalse para acumular agua. Luego, esta agua es conducida hasta una turbina hidráulica que gira con la fuerza del agua. Este movimiento activa un generador que produce electricidad, que después pasa por un transformador para ajustar su voltaje antes de enviarse a la red eléctrica.
Entre sus ventajas, las centrales hidroeléctricas producen energía renovable y no generan emisiones contaminantes durante su operación. Además, utilizan un recurso local y gratuito: el agua de los ríos.
Sin embargo, también tienen desventajas. Alteran el cauce natural de los ríos y pueden afectar a los ecosistemas acuáticos. Dependen de las condiciones climáticas, especialmente de las lluvias, y solo pueden construirse en lugares con características geográficas específicas, como desniveles importantes.
🌊 ¡Importante! Aunque las centrales hidroeléctricas generan energía limpia, debemos considerar su impacto ambiental, especialmente en la alteración de ecosistemas fluviales.