Las Tres Leyes de Newton
Las leyes de Newton surgieron de un pequeño tratado que luego se convirtió en la base de sus estudios sobre dinámica. Aunque inicialmente Newton formuló cinco leyes, posteriormente las refinó hasta quedarse con las tres que conocemos hoy.
La Primera Ley o Ley de la Inercia establece que todo cuerpo permanece en reposo o en movimiento rectilíneo uniforme a menos que una fuerza externa lo obligue a cambiar. Esto explica por qué te mueves hacia adelante cuando el colectivo frena bruscamente.
La Segunda Ley dice que el cambio en el movimiento (aceleración) es proporcional a la fuerza aplicada y ocurre en la misma dirección de esta fuerza. Esta ley se expresa matemáticamente como F=ma, relacionando fuerza, masa y aceleración.
💡 ¡Dato importante! Cuando Newton habla del "cambio de movimiento", se refiere específicamente a lo que hoy conocemos como aceleración, es decir, el cambio en la velocidad de un objeto.
La Tercera Ley afirma que para cada acción existe una reacción igual y opuesta. Las fuerzas siempre aparecen en pares: si empujás una pared, la pared te empuja con la misma fuerza pero en dirección contraria.